Cristina Béjar. De la serie Beso de sal, 2019
El jueves 28 de noviembre inauguramos la exposición Beso de sal, con obras de Cristina Béjar. La muestra tiene una instalación fotográfica, una pieza de video y un cortometraje realizado en formato de 16 mm. Las obras son resultado de más de seis meses de estudios en el programa de desarrollo de proyectos de Página en blando y 15 días de trabajo en el Taller de cine experimental, impartido por Juan Carlos Alom.
Como la mayoría de los proyectos fotográficos contemporáneos, el de Cristina Béjar es un ejercicio de narrativa. Su principal reto ha sido llevar al plano de la representación visual el relato de su relación con sus hijos. En el origen de ese relato hay una historia de miedos e incertidumbre. La resolución formal de la imagen fotográfica remite a un espacio sombrío y a una figuración fantasmagórica. La mejor decisión de Cristina Béjar ha sido no conformarse con la estructura icónica y bidimensional del objeto fotográfico y experimentar, no sólo con el cine y el video, sino con la instalación, forzando la presencia del objeto más allá de los límites de la impresión. Al desplazar el dramatismo del tema al objeto, la autora logra pulir las narrativas de la maternidad y de la infancia, tan maltratadas por el sentimentalismo.
Este ha sido un excelente comienzo para el ciclo Poéticas de riesgo, en el que exhibiremos, a lo largo de todo este invierno, los proyectos de nuestros alumnos.
La exposición Besos de sal contó con el apoyo de las empresas AuluxLab, Matanga, ElDinamo y Manufactura Sólida.
Beso de sal. Vista de la exposición. Página en blando, 2019